 |
| Hacer clik sobre la imagen para ampliar |
El encuentro, que significará el puntapié inicial de un torneo que se extenderá hasta el 24 de julio próximo, con la participación de 12 equipos, comenzará a las 21:45 en el estadio Ciudad de La Plata, con arbitraje del uruguayo Roberto Silvera.
En Argentina se espera la presencia del astro Lio Messi en el ataque, acompañado por Ezequiel Lavezzi y Carlos Tevez, después de que el "Apache" -que un momento llegó a estar en duda para jugar la Copa por motivos tácticos- se ganara un lugar entre los once a
fuerza de voluntad en las prácticas. Los dirigidos por Sergio "Checho" Batista, que afrontarán la competencia con la obligación de terminar con una racha de 18 años sin títulos, desde el trofeo continental ganado en 1993 en Ecuador, integran el Grupo A del certamen junto al mencionado Bolivia, a Colombia y Costa Rica.
En el partido de mañana, el primero del certamen, Batista armaría un tridente ofensivo con aspiraciones de tomar por asalto el área de Bolivia, en busca de arrinconar al conjunto que dirige el argentino Gustavo Quinteros, generarle situaciones de gol y lograr un triunfo convincente en el debut.
Messi, múltiple campeón con el Barcelona de España, pero en deuda hasta al momento con la Selección, tendrá como aliados en la mitad de la cancha a Ever Banega -considerado por Batista como el "socio" ideal del rosarino- y Esteban Cambiasso, un paso por delante de Javier Mascherano.
Y en el fondo, para custodiar el arco que defenderá Sergio Romero, se pararán Javier Zanetti -el hombre récord del conjunto argentino, con 138 partidos en su haber-, Nico Burdisso, Gabriel
Milito y Marcos Rojo.
De todos modos, la mayor expectativa de los hinchas argentinos, a 25 años del título mundial ganado en México 1986 de la mano del grandioso Diego Maradona, estará depositada en "Carlitos" Tevez, considerado el "jugador del pueblo", y sobre todo en lo que pueda inventar Messi.
La "Pulga", campeón mundial juvenil sub-20 en 2005 y ganador de la medalla dorada en los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008, aún mantiene el blanco en su notable currículum el casillero reservado para los palmarés con la Selección mayor.
Tevez, por su parte, después de haber quedado casi relegado por no encajar -en teoría- en el esquema de juego que propone Batista, se ganó un lugar en el plantel argentino, a pedido del público, y luego superó en los entrenamientos a Ángel Di María en la carrera por obtener una plaza en el once titular.
Después de enfrentar mañana a Bolivia, Argentina viajará a Santa Fe para medir fuerzas con Colombia el próximo miércoles, en la continuidad de la zona A, y cerrará su participación en el
grupo el lunes 11 de julio en Córdoba, donde tendrá como rival a una joven formación de Costa Rica.
En el equipo del Altiplano, en tanto, el único hombre de punta sería Marcelo Martins este viernes en La Plata, como parte de un 4-3-2-1 que dispondría Quinteros para jugar contra la selección dueña de casa, soñando con protagonizar una sorpresa mayúscula en caso de evitar un triunfo nacional.
"No vamos a jugarle de igual a igual a la Argentina, por supuesto que no. Pero vamos a hacer un planteamiento especial", expresó Quinteros, antes del debut en la 43ª edición de la Copa
América.
El entrenador planea ubicar a Walter Flores y Jhasmani Campos por delante de una línea de tres mediocampistas, en un intento por abastecer al delantero del Shakhtar Donetsk ucraniano, sobre todo en jugadas de contraataque.
Bolivia, que aún recuerda con una sonrisa en los labios y el pecho inflado aquella goleada 6-1 que le propinó a Argentina en abril de 2009 en La Paz, en un partido por eliminatorias, hace más de 20 días que se prepara en este país para afrontar el certamen, con el objetivo de superar al menos la ronda inicial.
Hace 14 años que el conjunto boliviano no gana un encuentro de la Copa América. Su última vez fue en 1997, cuando organizó la 38ª edición de la competencia.
