Transiciones: en el ´58 y en el ´74 también hubo supremacía europea

En el Mundial de Suecia de 1958 la el seleccionado argentino vivió una gran decepción, fue goleado por Checoslovaquia por 6 a 1 -antes había caído ante Alemania por 3 a 1- y fue eliminado en primera fase. De nada sirvió la victoria ante Irlanda del Norte, también 3 a 1.
En 1974, Mundial de Alemania, la selección nacional cayó ante Holanda, apogeo de la "Naranja mecánica" por 4 a 0 y hubo derrotas frente a Polonia (2-3 y Brasil 1-2).
La curiosidad es que mientras Brasil ganó brillantemente el Mundial de Suecia, en el 74 Alemania superó a Holanda en la final 2 a 1.
La superioridad del fútbol europeo sobre la Argentina en ambas ediciones se plasmó en cuestiones "tácticas y físicas", reconoció Amadeo Carrizo, legendario arquero de River y arquero de la selección que cayó en Suecia.
"En el74 Holanda nos goleó dos veces: hubo un 4 a 1 en un amistoso un mes antes", evocó Mario Kempes hace poco.
Hoy, la derrota ante Alemania por 4 a 0 en el Mundial de Sudáfrica "golpeó" mucho y por encima del primer gran debate en torno a la continuidad de Diego Maradona como director técnico, quizá el enfoque gire -como una variante- sobre la planificación.
"Argentina tiene grandes jugadores en todas las ligas del mundo, especialmente en Europa. El futbolista argentino está cotizado internacionalmente. Quizá, el problema en el juego del seleccionado es que todos provienen de sistemas tácticos distintos", dijo Juan Carlos Touriño, ex Quilmes, 1970, que pasó al Real Madrid, donde jugó seis años.
Mientras varios ex futbolistas de renombre se inclinaron por la continuidad de Diego Maradona al frente de la selección (Norberto Alonso, Ricardo Bochini, Claudio Borghi, Nery Pumpido, Ricardo Gareca y Roberto Sensini, entre otros), también hubo opiniones encontradas.
En el59 la AFA priorizó un cambio de entrenador. Luego de veinte años se fue Guillermo Stábile y un triunvirato se hizo cargo (Victorio Spinetto, acompañado por José Della Torre y José Barreiro). Con la base de Racing, campeón del58, la Argentina ganó el Torneo Sudamericano del59. Brasil con el "scratch" (por lo perfecto) quedó segundo.
No obstante, en los60 hubo una fiebre compradora. Los presidentes de Boca y River, Alberto J. Armando y Antonio Liberti, respectivamente -hoy los estadios llevan sus nombres- importaron futbolistas masivamente. Llegó el "fútbol espectáculo".
Sin embargo, Boca y River fueron equipos "inconexos" diría Dante Panzeri. El campeonato del59 lo ganó San Lorenzo con una delantera que superó los 70 goles -José Sanfilippo hizo 31- y el del60 fue para Independiente de Avellaneda, tras gran actuación de Argentinos Juniors que fue puntero durante 25 fechas.
El "rojo" lo ganó de arremetida con el aporte de los uruguayos Tomás Rolan, Alcides Silveyra y Vladas Douskas. Aunque el baluarte fue el santiagueño Rubén Marino Navarro, defensor central y capitán de la selección nacional en esa época.
El equipo de La Paternal se armó con varios ex River (Ricardo Ramaciotti, Juan Carlos Valentino y Juan Carlos Malazzo), algunos que venían de Primera B (Osvaldo Carceo, ex All Boys, Hugo González, ex Excursionistas) y el "cerebro" Martín Pando, que había descendido con Platense en el55. Jugaron un fútbol ofensivo y vistoso.
En los60 llegó una veintena de futbolistas brasileños donde sólo quedó en la memoria futbolera el "cañonero" Paulo Valentím, goleador de Boca entre 1960 y 64. Había sido el "9" de Brasil cuando se fue "Vavá" al Atlético Madrid. "Garrincha", "Didí", Valentím, "Pelé" y "Chinezinho" en Buenos Aires, marzo del59.
Antes y después del74 una decena de jugadores argentinos triunfó en Europa, sin plasmar un juego de conjunto en la selección.
Se consagraron Héctor Yazalde, "Balón de Oro" Sporting de Lisboa; Mario Kempes, figura en el Valencia campeón de la Liga española; Carlos Babington en Alemania y Carlos Bianchi y Angel Hugo Bargas, en Francia.